La Comunidad Educativa de la Facultad de Trabajo Social vuelve a pronunciarse exigiendo al Estado políticas públicas que materialicen los principios contenidos en la CIDN incorporada a nuestra CN en 1994, en la legislación nacional 26.061/06 y en la provincial 13.298/04.
Motiva este pronunciamiento público la profunda preocupación e indignación que genera la persistencia de situaciones de vulneración de derechos de niños y niñas de nuestra ciudad -y de la provincia en general- que permanecen varias horas en la calle, "corridos" de las plazas, fuera de la escuela y de sus hogares, con poco abrigo, mal alimentados y con problemas de salud por citar algunos problemas que padecen de manera cotidiana y frente a los cuales la única respuesta estatal pareciera ser la represiva, en oposición a la acción protectoria e inclusiva a la que está legalmente obligado.
Nuestra Facultad junto a otras organizaciones sociales e instituciones estatales realiza un trabajo territorial desde hace más de 20 años, dirigido a generar estrategias que pongan en tensión esta realidad; no obstante las dificultades evidenciadas en la aplicación de la ley como principio rector de las políticas de atención a los niños y niñas nos convocan a realizar un llamamiento a las autoridades que ponga fin a esta situación.
Sabemos que muchos compañeros hacen denodados esfuerzos en los territorios para instituir prácticas sociales inclusivas, democratizar el debate y la construcción de políticas desde los Consejos Locales y/o Asambleas distritales y desde otros tantos espacios de compromiso militante. Pero, la falta de decisión política para generar condiciones objetivas que garanticen el pleno funcionamiento del Sistema de PPID desde la Comisión Interministerial, la actuación del Defensor del Niño, el funcionamiento del Observatorio Social, la creación y funcionamiento adecuado de los Servicios Locales y Zonales, asignando los recursos humanos y presupuestarios necesarios, indican una vez más que la problemática de la niñez no constituye un tema prioritario en la agenda del gobierno provincial y local.
Del recorrido transitado como Unidad Académica en el trabajo de indagación e intervención territorial en relación al tema observamos con preocupación las siguientes situaciones:
En este sentido, es fundamental avanzar en la construcción de una nueva institucionalidad que redireccione las políticas dirigidas a la atención de niños, niñas y jóvenes desde el enfoque de derechos. Y ello sólo es posible si estamos dispuestos a realizar un profundo replanteo sociopolítico, cultural y económico en pos de generar condiciones para -desde el Estado- acompañar a las familias en sus funciones de crianza. Diseñar e instrumentar programas que atiendan las situaciones de deterioro del entramado familiar y comunitario provocadas por las condiciones de marginalidad y pobreza en las que muchas familias se encuentran, producto de las políticas neoliberales que los excluyeron del sistema productivo y del mercado de trabajo, es el principal desafío para fortalecer y consolidar nuestra democracia haciendo realidad la construcción de una sociedad más justa e igualitaria.