Fundamentación
Como parte de la formación profesional de los futuros trabajadores sociales, la Cátedra propone la realización de prácticas de formación profesional con la finalidad de aprehender el ejercicio profesional fuera del ámbito académico. Partimos de concebir a la práctica como una expresión de la práctica social, lo que implica que su desarrollo se encuentra atravesado por el contexto histórico coyuntural, es decir, que las mismas están siempre condicionadas por la complejidad de la realidad. En el desarrollo de las prácticas de formación profesional de los últimos años, observamos que ante la dificultad que atraviesan las instituciones por el crecimiento de la pobreza y la imposibilidad de responder a la complejidad con que se presentan las demandas sociales, se viene generando una regresión significativa hacia las formas tradicionales de atención o una suerte de neofilantropización de la asistencia social. Por otra parte hay un importante desarrollo de diversas organizaciones sociales, que expresan la capacidad de producir políticas que contribuyen no solamente a la satisfacción de necesidades materiales, sino también a reivindicaciones atinentes a la ética, la justicia y a la conformación de un estado más presente en la dirección de lo social.
Frente a la complejización de los problemas sociales de la actualidad y el modo particular en que se expresan en los espacios de intervención profesional, las propuestas de prácticas en cada nivel se transforman permanentemente, hacia la construcción de estrategias pedagógicas y formulación de proyectos y líneas de intervención en consonancia con las necesidades que nos presenta la realidad social, los sujetos de la actuación profesional y los estudiantes en su proceso de formación. En este sentido, nuestra intencionalidad implica que los estudiantes rescaten la realidad institucional actual, reconociendo por un lado estas tendencias regresivas neofilantrópicas, como también la existencia de grupos y organizaciones sociales con los cuales se puede desarrollar un proceso de aprendizaje significativo. Esto nos permitirá alcanzar el objetivo de lograr una inserción comunitaria vinculada con los procesos de despliegue y construcción de la ciudadanía.
Objetivos Generales:
De formación
Generar un proceso de inserción comunitaria a nivel institucional, en vínculo con las organizaciones comunitarias a fin de aprehender la dinámica de su funcionamiento y capacidad de construcción ciudadana.
De transferencia
Objetivos específicos:
Metodología de trabajo
La inserción comunitaria, como objetivo central de la práctica formativa, vinculada con los procesos de despliegue y construcción de la ciudadanía, se considera como "un primer acercamiento a la trama social que los sujetos establecen en su vida cotidiana con relación a la satisfacción de sus necesidades. El significado metodológico de este momento consiste en iniciar el conocimiento de dicho contexto particular, a fin de establecer una ubicación profesional y una mirada estratégica de dicha ubicación"1.
Así entendida, esta permite establecer una interacción con los actores involucrados en la intervención profesional, ir conociendo a la comunidad y la manera particular en que se expresa la cuestión social desde un recorte institucional y comunitario. Si bien entendemos a las instituciones como la forma en que adquieren las relaciones sociales en cada momento histórico, siendo la base de la producción - reproducción social de subjetividad, el modo concreto en que esto se plasma, es la cotidianeidad. Nos interesa entonces que el estudiante que desarrolla sus prácticas de formación profesional, pueda reconocer las distintas dinámicas organizativas del barrio, así como su anclaje en lo histórico, lo cultural y lo identitario, desde las experiencias desarrolladas en el espacio comunitario. Para ello es necesario el acercamiento a los diferentes grupos e instituciones con reconocimiento social en la zona, a fin de poder establecer puentes que posibiliten una coordinación alrededor de las problemáticas comunes que estas organizaciones enfrentan. Esto permitirá establecer acciones de otro tipo, con relación al fortalecimiento grupal de las organizaciones, a partir de las actividades que los estudiantes puedan darse en cada caso.
El trabajo de campo adquiere su particularidad en tanto se genera un proceso de inserción en el ámbito comunitario. Así el proceso de enseñanza aprendizaje deberá estar orientado hacia el conocimiento de las condiciones sociales de los sujetos con los cuales se relaciona, la lectura de la vida barrial respecto a sus organizaciones comunitarias, instituciones, servicios y recursos existentes. En este sentido consideramos que el desarrollo de una actitud investigativa en la definición de los objetivos específicos y la construcción teórica de las temáticas, orientará la lectura de las situaciones sociales emergentes del trabajo de campo, como una manera de acercarse a lo social, posibilitando la descripción, análisis y comprensión de los fenómenos sociales.
Nos interesa por lo tanto, explorar las estrategias de supervivencia utilizadas por aquellas familias y grupos que acumulan una serie de desventajas con relación a la satisfacción de sus necesidades. Para ello será necesario construir un marco teórico metodológico respecto al problema en cuestión, que nos permita visualizar relaciones y procesos llevados a cabo por las familias y grupos como estrategias de supervivencia y su vínculo con las políticas sociales existentes. Esto nos permitirá estudiar el impacto de la pobreza en las posibilidades de desarrollo de lazos solidarios, en los cuales los sujetos se reconozcan como ciudadanos autónomos, en un contexto de relegación, heterogeneidad y fragmentación social.
Por último nos interesa el papel que juegan los programas sociales en la constitución de actores colectivos, a través de la visualización de los mecanismos que aportan o no al fortalecimiento grupal o institucional en la perspectiva del reconocimiento y construcción activa de sus derechos.
Con el sentido de profundizar y otorgar direccionalidad al proceso de inserción se consideran los siguientes aspectos:
1.- Caracterización de la comunidad. Su historia en relación a la organización de espacios colectivos. Situación actual y vinculación con la institución-sede y/o referente de práctica. Infraestructura barrial: recursos institucionales desde diferentes referencias (vecinal, institucional, municipal, etc.). Reconocimiento de informantes claves. Recursos barriales formales e informales.
2.- Caracterización de la institución/organización-centro de práctica. Tipo y dependencia. Programas, proyectos, actividades, recursos disponibles, demandas desde la población, problemáticas observadas desde la perspectiva institucional y procesos de implementación de satisfactores. Sentido de las acciones. Vinculación con otras instituciones.
3.- Análisis del proceso. Caracterización de la aproximación inicial al contexto particular de su práctica. Aspectos significativos: continuidad, expectativas, demanda institucional al equipo y su resignificación en la definición de los objetivos particulares. Núcleos problemáticos y análisis de los mismos desde las diferentes racionalidades. Estrategias grupales en el proceso: abordaje conceptual y metodológico. Obstáculos y facilitadores presentes en el proceso.
4.- Análisis de las expresiones particulares de la cuestión social en el ámbito comunitario e institucional. Aspectos significativos con relación al contexto. Estudio de las prácticas comunitarias de las organizaciones a partir de la finalidad y direccionalidad de sus acciones, conflictos, estrategias e impacto en la resolución de problemáticas. Exploración en cuanto a las representaciones acerca de lo comunitario, la organización, participación, la solidaridad desde la construcción discursiva de los referentes y destinatarios de las acciones de las organizaciones de base, ONGs e instituciones públicas.
Evaluación:
El proceso de evaluación de la práctica se constituye en el contexto del taller y de las supervisiones en terreno. Es ahí donde se ponen en juego los supuestos, preconceptos, representaciones y saberes, que van trabajándose a lo largo del año a la luz de los procesos llevados por el grupo en su práctica concreta en el barrio. En este sentido el proceso se evalúa a partir de la capacidad individual y grupal para construir teóricamente problemáticas sociales, desarrollar y profundizar instrumentos y articular expresiones microsociales con indicadores y tendencias a nivel macrosocial.
Así los estudiantes deberán dar cuenta de los diversos momentos de este proceso a partir del registro de campo individual, exposiciones grupales, trabajos de articulación teórico-práctica, evaluaciones parciales, informes de avance y por último, un trabajo final grupal que presente y comunique el trabajo desarrollado como producto analítico del proceso de aprendizaje. De acuerdo al aspecto cualitativo se observará: participación, interés, creatividad, elementos que atraviesan tanto el desempeño en el taller como en los trabajos por equipo de prácticas.
Con respecto a la supervisión grupal se pondrá énfasis en el desempeño y participación del equipo, entrega a término de trabajos, informes y registros, capacidad de trabajo grupal, organización, planificación de actividades,responsabilidad, capacidad de autocrítica y de incorporar señalamientos realizados en el marco del taller.
Por último, destacamos los siguientes aspectos centrales de la evaluación:
-Cumplimiento de un mínimo de cuatro horas semanales de presencia en elterritorio.
-Asistencia al taller y a las supervisiones grupales/individuales del 80% de losencuentros realizados.
-Participación en el espacio semanal del equipo de prácticas por fuera del Taller, para la planificación y evaluación de las actividades de la práctica.
-Participación en los espacios de supervisión de la práctica en la frecuencia acordada previamente con la Coordinación del Taller.
-Aprobación del Informe individual cuatrimestral.
-Aprobación del Informe Final grupal de las Prácticas de Formación Profesional.
1 Rozas Pagaza, Margarita: Una perspectiva teórico metodológica de intervención en trabajo
social. Ed. Espacio. Bs As. 1998.